Si es cierto que las personas representan el recurso más preciado de una empresa, como ya es una opinión generalizada y compartida, también lo es que hay que motivarlas y ayudarlas a dar lo mejor de sí mismas.

¿Cómo? Hay muchas maneras en que una empresa puede hacer esto, una de ellas es introducir una cultura de retroalimentación, que le permita establecer una comunicación abierta y constructiva con su equipo.

¿Qué es un feedback?

El feedback es una respuesta, o reacción, que puede surgir de forma espontánea e instintiva o se puede pedir a través de muchos canales, para – por ejemplo en nuestro caso – medir el rendimiento de una empresa, negocio o acción.

En el ámbito empresarial, el feedback puede tener doble objetivo: analizar el mercado, midiendo el rendimiento de los negocios para actuar mejoras y ajustes, y evaluar la propia gestión empresarial. Con respecto a este último punto, es evidente que la opinión de los empleados es crucial para tomar decisiones hasta la estructura del trabajo.

En otras palabras, cuando una empresa recibe comentarios, sean estos voluntarios o no, su reacción cambia según el tipo de respuesta que obtenga. Además, se crea una interacción entre la empresa, los empleados y las personas con las que ellos interactúan.

¿Qué papel desempeña el feedback en las empresas?

Por lo dicho, el feedback representa una válida herramienta de comunicación con los colaboradores, ayudando a orientar y encajar los objetivos de la empresa, reflexionando sobre el trabajo, tanto en términos positivos como de mejora.

Además, una empresa que adopte el feedback como herramienta de comparación seguramente podrá verificar los beneficios de este enfoque en términos de productividad y clima corporativo.

Asimismo, tener que lidiar con un entorno en el que la escucha, el estímulo a la mejora y la confianza son la base tendrá implicaciones positivas para todo el equipo.

No sólo eso, el feedback también actúa como un momento de cierre necesario en un proceso de selección, un momento que puede ayudar a difundir una imagen positiva de la empresa, tanto en caso de un resultado positivo como negativo del proceso.



¿Por qué es tan importante?

Para que con esta herramienta produzca realmente un resultado positivo, por un lado es fundamental que quien la recibe escuche, trate de no interrumpir y haga preguntas para aumentar la claridad de lo que se comparte.

El objetivo del feedback empresarial es, por tanto, producir un efecto positivo, ofreciendo a quien lo recibe una posibilidad de crecimiento y mejora.

Por supuesto, el feedback juega un papel central en el proceso de selección, especialmente cuando el resultado no es positivo. Es comprensible que dejar a alguien en un limbo donde día tras día se desarrolla la sensación de haber sido descartado no sea beneficioso ni para el candidato ni para el reclutador. Por lo tanto, es fundamental que el reclutador no descuide el momento final de la selección, sino que le preste especial atención.

Es responsabilidad de quienes dan feedback asegurarse de comunicarse de forma estructurada, considerando ciertos aspectos para evitar que se perciba como una crítica negativa que pueda afectar la autoestima del empleado, así como su compromiso y productividad.

En resumen, es fundamental que el feedback sea entregado de manera constructiva y cuidadosa para no socavar la confianza ni desmotivar al empleado.

¿Cómo construir un buen feedback empresarial?

Como hemos podido averiguar, es importante adoptar el enfoque correcto para asegurarse de tener una buona estructura de captación y recepción de feedback. En este sentido, es útil seguir algunas precauciones.

Primero, es esencial poner objetivos concretos del feedback. Este debe ser específico y medible, basado en indicadores. Evaluamos cuánto falta para lograr un objetivo o reconocemos el progreso alcanzado.

Esta claridad ayuda a la empresa a comprendere mayormente en qué puede mejorar.

Secundariamente, es fundamental ser claros y específicos también en pedir feedback. Debemos compartir claramente el propósito del feedback y, sobre todo, tener realmente en cuenta las observaciones.

Además, debemos tener claro que lo que se puede criticar es una situación o tarea específica, no es nuestra propia persona. Especialmente en el caso de comentarios negativos, siempre debemos buscar el lado positivo, sin considerarlo como un ataque. En otras palabras, no hay necesidad de desanimarse ni de buscar recompensas.

el feedback debe centrarse en un comportamiento específico, una situación, una tarea y no en la persona en su conjunto, para no ser percibida como crítica sino para llevar a la persona que la recibe a reflexionar sobre un elemento específico, sin ser malentendidos.
  • Investigaciones por email;

  • Encuesta de satisfacción de clientes: esta es una herramienta de diagnostico para evaluar el nivel de satisfacción de la audiencia y es útil tanto a nivel interno entre los equipos, como para tener la opinión del público;

  • Encuestas internas y externas: permiten traquear y analizar la opinión directa y sincera de usuarios y empleados;

  • Redes sociales: sobre todo aquí es importante cuidar la comunicación, el lenguaje y la forma;

  • Páginas web interactivas: analizan los movimientos de los usuarios sin que haya un comentario directo por su parte. En otras palabras, una empresa puede ajustar sus acciones según los gustos e intereses de la audiencia, analizando su comportamiento en la web y utilizando el feedback y juicio indirecto del público.

Lo más importante en resumen

En definitiva, aunque parezca extremo, la desventaja mayor de no tener una buen estructura de feedback en las empresas es que las personas abandonan sus trabajos con frecuencia.

La mejor recomendación que se puede dar al respeto para contrarrestar esta tendencia, es que es crucial fomentar un clima empresarial que permita el crecimiento personal. La mejora individual debe ser un objetivo primordial, pero esto no es posible sin el apoyo necesario para guiar los esfuerzos. La retroalimentación es esencial, ya que proporciona una evaluación de las actividades y ayuda a orientar hacia nuevas tareas y responsabilidades.

Finalmente, una organización empresarial basada en el feedback es más estable y permite a las personas orientarse mejor y enfrentar sus responsabilidades con serenidad. Este enfoque debe comenzar en el proceso de selección y continuar a lo largo de la vida laboral. Implementar estos cambios culturales toma tiempo pero ofrece ventajas significativas.

Beneficios principales

El feedback empresarial es capaz de fomentar un clima productivo envidiable dentro de los muros de la empresa. Y no solo. De hecho, también garantiza una visión más objetiva y con visión de futuro, especialmente útil para abordar mejor los costes empresariales y centrarse en el presupuesto adecuado.



En general, se cree que el feedback de la empresa es una crítica o juicio específico, comunicado unilateralmente por el directivo al empleado, por el cliente a la empresa, etc. Sin embargo, evidentemente, estamos hablando de un comportamiento que deja algo a quien lo recibe.

Por lo tanto, el feedback resulta ser un aspecto imprescindible en la gestión de la empresa, capaz de concienciar al recurso de la marcha de su trabajo y de los objetivos alcanzados. Como una auténtica inyección de confianza.