El concepto de Employer Branding, o marca empleadora, se refiere a la reputación y, por ende, a la imagen que una empresa proyecta hacia sus empleados. Básicamente, la consecuencia de tener una buena marca empleadora es que las propias compañías logran fidelidad y confianza, con lo cual se vuelven más exitosas y eficientes.
En otras palabras, al igual que en todos los otros ámbitos, desde la perspectiva de un jefe, tener una buena reputación conlleva unos beneficios lo suficientemente grandes para producir un crecimiento de la compañía entera.
¿Qué es el Employer Branding?
La productividad en una empresa es el elemento principal que un jefe busca, pero parece ser algo muy complejo de conseguir. Hay que tener en cuenta muchos factores; lo primero: el ambiente laboral, el cual se tiene que construir paso a paso, sin dejar de cuidarlo a lo largo del tiempo.
El Employer Branding es la herramienta de comunicación más efectiva para que tu empresa crezca. En otras palabras, la reputación de la marca resulta ser la tarjeta de visita de la compañía. En concreto, la base de una marca empleadora efectiva es la comunicación. De hecho, entre las claves para un entorno laboral eficiente, se destaca justo la importancia de una buena comunicación.
Estrategias de Employer Branding
Ahora bien, si has llegado hasta aquí, probablemente sea porque te interesa saber cómo incorporar la marca empleadora a tu empresa. A continuación hemos destacado unos tips para aplicar estas nuevas medidas de comunicación a tu compañía.
Todas las ventajas
- Aumento de talentos que quieren incorporarse a la empresa;
- Reducción del absentismo en el curro;
- Refuerzo de motivación entre los empleados;
- Aumento de la fidelización de los trabajadores a la marca y a los propios empleadores.
Errores que debes evitar
Hemos dicho que entre más buena sea la reputación de una empresa, más atractivas son sus posiciones para nuevos candidatos. Por ende, en cambio, si tanto los empleados como los potenciales candidatos generan una mala imagen de la empresa, la percepción que se tendrá en el mercado laboral será negativa.
Ahora bien, resulta evidente que para un Employer Branding eficiente no solo hay que aplicar medidas funcionales, sino también es importante evitar errores que podrían disminuir el rendimiento de las estrategias.
Malas ofertas de trabajo
Evidentemente, las ofertas de trabajo bien redactadas sin la clave para que nuevos talentos se acerquen a la empresa sin que esta los busque. En concreto, presentar una oferta de trabajo para nada atractiva, mal redactada y desorganizada, probablemente sea la manera más rápida para que los potenciales candidatos no apliquen.
Página de empleo poco intuitiva
Cuando un talento busca un nuevo trabajo, es importante que pueda acceder a la información sobre la misma y, a la vez, solicitar una entrevista. Por ende, cuanto más poco atractiva sea la página de empleo, menos talentos captará. Por consiguiente, la empresa tendrá que esforzarse más en la búsqueda de candidatos, además de valorizar su trabajo a través de otras herramientas.
Es importante entender que también la página de empleo de una compañía pertenece al conjunto de rasgos útiles para la construcción de la imagen de la misma, con lo cual, si la percepción desde el mercado es negativa, las oportunidades de que nuevos empleados se acerquen serán cada vez menores.
Descuidar la comunicación por redes sociales
Hoy en día, todo el mundo está metido en las redes sociales, por ende, es importante tener en cuenta que para alcanzar cuantos más targets posibles sería recomendable comunicarse por las redes.
Además, abrir páginas en las redes sociales más utilizadas por las empresas no solo contribuye al conocimiento de la misma, sino que permite a la misma recibir un feedback continuo para que ajuste sus rasgos a las necesidades del mercado.
¿Por qué es tan efectivo el Employer Branding?
Evidentemente, tener una buena relación de trabajo con tus empleados es esencial para asegurar, como jefe, que eres capaz de trabajar de forma productiva. Si un jefe no mantiene una comunicación fluida, puede perderse una retroalimentación importante que podría llevarle por el camino del bajo rendimiento. Por ende, mantener relaciones positivas no solo ayudará a mejorar la forma en que interactuamos con nuestros propios equipos, sino que también nos hará más propensos a llamar la atención de aquellos trabajadores prometedores que quieren que su conjunto de habilidades sea visto como valioso por los empleadores de todas las industrias.
Además, es una estrategia muy interesante en el ámbito de la captación de talentos, puesto que tener una buena reputación llama la atención de candidatos y permite a los empleadores ahorrar esfuerzos en la búsqueda de nuevas figuras profesionales. Incluso, aporta otros beneficios porque cuantos más talentos se acerquen, mejor será la percepción de la empresa, con lo cual el crecimiento será cada día más exitoso.